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¿Por qué me siento tan triste si acabo de tener un bebé?

Acabas de traer al mundo a un hermoso bebé y todos están encantados. Todos… excepto tú. Si se supone que esta debe ser la etapa más linda de tu vida, ¿por qué tú no te sientes feliz?

En primer lugar, piensa que no estás sola. Esto les ocurre a muchas mujeres. Entre el 40 y el 80 por ciento de las nuevas mamás experimentan lo que se conoce como la tristeza de después del parto (baby blues en inglés), una reacción emocional que incluye ganas de llorar, desdicha, preocupación, inseguridad y fatiga. La tristeza posparto suele comenzar unos días después de tener al bebé, y mejora por sí misma en una o dos semanas.

Sin embargo, si tu tristeza es muy intensa o ya dura más de dos semanas continuas, puede que te preguntes si se trata de algo más serio.

¿Puedo estar sufriendo una depresión posparto?

A veces es difícil distinguir entre la depresión clínica, y el estrés y el cansancio normales de la maternidad. Pero si tu tristeza o desesperación son tan intensas que te impiden hacer tus actividades normales, como cuidar de ti misma y de otras personas, podrías tener depresión posparto.

Alrededor del 10 por ciento de las nuevas mamás desarrollan depresión posparto, pero muchos expertos creen que este número es aún mayor, ya que muchas mujeres no buscan tratamiento. Si estás teniendo dificultades, habla inmediatamente con tu médico para que te hagan una evaluación.

Según la Asociación Estadounidense de Psiquiatría, la depresión posparto puede empezar en las semanas siguientes al nacimiento del bebé o incluso antes. Cerca de la mitad de las mujeres con depresión posparto presentan síntomas durante el embarazo.

Si en cualquier momento después del nacimiento de tu bebé, tu médico piensa que padeces de depresión, podría recomendarte a un terapeuta y recetarte un medicamento antidepresivo, si es necesario. También podría referirte a un psiquiatra para que te brinde tratamiento. Ya sea que te diagnostiquen una depresión antes, durante o después del embarazo, es importante buscar tratamiento.

¿Cuáles son los síntomas de la depresión posparto?

Los síntomas de la depresión posparto son los mismos que los de una depresión que ocurre antes o durante el embarazo.

Podrías tener depresión posparto si experimentas cinco o más de los siguientes síntomas casi todos los días, durante la mayor parte del día, y por dos o más semanas consecutivas:

  • Sensación de tristeza profunda, vacío o desesperanza.
  • Llanto constante.
  • Pérdida de interés en actividades que antes resultaban agradables.
  • Dificultad para dormir de noche o mantenerte despierta durante el día.
  • Pérdida de apetito o consumo excesivo de alimentos, o cambio de peso no intencional.
  • Sentimiento abrumador de inutilidad o culpa excesiva.
  • Agitación o pereza.
  • Dificultad para concentrarte o tomar decisiones.
  • Sensación de que vivir no vale la pena.

 

Otros síntomas que también podrían indicar depresión incluyen:

  • Irritación o enojo.
  • Evitar los amigos y la familia.
  • Preocuparte excesivamente por el bebé.
  • No interesarte por el bebé o no lograr cuidarlo.
  • Sentirte tan exhausta que eres incapaz de salir de la cama por varias horas.

En raras ocasiones, algunas mujeres con depresión posparto tienen delirios o alucinaciones y pueden hacer daño a sus bebés.

Nota: Si tienes pensamientos relacionados a lastimarte a ti misma o a tu bebé, busca ayuda profesional de inmediato.

¿Cuáles son las causas de la depresión posparto?

La depresión posparto deriva de una combinación de factores hormonales, medioambientales, emocionales y genéticos que no podemos controlar. Algunas mujeres podrían sentirse responsables de tener depresión posparto, pero la depresión no es el resultado de algo que hiciste o dejaste de hacer.

También podrías estas más propensa a tener depresión posparto si tuviste ansiedad o depresión durante el embarazo o si pasaste por un periodo de tristeza después de dar a luz. Otros factores que colaboran al desarrollo de la depresión posparto incluyen el cansancio extremo, la adaptación emocional a la maternidad y la falta de sueño.

¿Cuál es la diferencia entre depresión posparto y depresión?

Una de las diferencias es el momento en que se desarrolla. Se conoce como depresión posparto cuando ocurre después de tener un bebé. Y a diferencia de la depresión que no está relacionada con el embarazo, la depresión posparto está vinculada a cambios hormonales específicos que suceden en el cuerpo de la madre después del nacimiento del bebé.

Los investigadores creen que estos cambios repentinos en los niveles hormonales pueden desencadenar una depresión en las mujeres que son más sensibles a las alteraciones en los niveles de estrógeno y progesterona.

¿Cómo se trata la depresión posparto?

El tratamiento de la depresión posparto es igual al tratamiento de una depresión que ocurre antes o durante el embarazo. Si tus síntomas son muy leves, la recomendación médica podría ser simplemente esperar un tiempo mientras te mantienen en observación a través de consultas médicas periódicas. Si tus síntomas son más severos, tu médico podría referirte a un psicoterapeuta o recetarte medicamentos antidepresivos, o ambas cosas.

La psicoterapia (terapia con un psicólogo, consejero o psiquiatra) podría ser individual o con un grupo de mujeres en la misma situación que tú. Si te recomiendan terapia familiar, el terapeuta trabajará contigo y tu pareja u otros familiares.

Los antidepresivos estabilizan las sustancias químicas en el cerebro que afectan el estado de ánimo. Habla con tu médico acerca de los diferentes tipos de antidepresivos. A veces se combinan varios medicamentos para obtener el mejor resultado. Probablemente empieces a sentirte mejor después de tres o cuatro semanas de empezar el tratamiento.

Los antidepresivos podrían tener efectos secundarios, pero la mayoría de ellos desaparecen en poco tiempo. Si estos efectos secundarios interfieren en tus actividades diarias, o si tu depresión se intensifica, habla inmediatamente con tu médico.

¿Es seguro tomar antidepresivos mientras estás amamantando?

Generalmente se considera seguro tomar antidepresivos durante la lactancia. Los medicamentos llegan al bebé a través de la leche materna, pero en niveles muy bajos.

Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) se consideran los más seguros y se recetan frecuentemente a mujeres que tienen depresión y están amamantando. Otros medicamentos para la depresión también parecen ser seguros, incluyendo los inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina (IRSN), y la mayoría de los antidepresivos tricíclicos (ADT).

¿Por qué es importante buscar tratamiento?

Si no tratas la depresión, podrías sentirte desamparada, confundida e incluso asustada si el problema se agrava. La buena noticia es que sí es posible tratar la depresión, o sea que no tienes que sufrir.

El tratamiento te brindará el apoyo necesario para impedir que entres en una depresión profunda y más difícil de tratar. Además, tener a un terapeuta y un médico que entienden tu problema también te ayudará a sentirte menos sola. Y al sentirte mejor podrás conectar mejor con tu bebé y cuidarlo mejor.

Si tu médico te recomendó simplemente esperar mientras permaneces bajo observación, es importante que te presentes a todas tus citas mientras sigas teniendo síntomas, así podrás empezar con la psicoterapia o los medicamentos inmediatamente si empiezas a sentirte peor.

¿Qué es la ansiedad posparto?

Muchas mujeres con depresión posparto también se sienten ansiosas o preocupadas, pero si la sensación de pánico o preocupación es intensa y persiste hasta el punto de provocar una angustia profunda e impedirte de hacer tus actividades diarias, tal vez tengas un trastorno de ansiedad. Los estudios indican que hasta el 8.5 por ciento de las mamás sufren de ansiedad clínica después del parto.

Algunos de los miedos más comunes son la preocupación incontrolable de que el bebé padezca el síndrome de muerte súbita infantil o de que te quiten el bebé.

Además, quizás tengas una preocupación excesiva de que critiquen tu forma de criar a tu bebé, o de que tus amigos y familiares no te apoyen. También podrías sentir una vergüenza o inseguridad muy grande con relación a tu cuerpo posparto y te cohíbas de tener relaciones con tu pareja.

Un trastorno de ansiedad también podría afectar a tu salud. Por ejemplo, podrías sufrir tensiones musculares o tener dificultad para dormir.

Hay buenos tratamientos para la ansiedad posparto, por tanto habla inmediatamente con tu médico si experimentas una sensación abrumadora de preocupación o pánico.

¿Cómo puedo sobrellevar la depresión posparto?

Además de obtener la ayuda de un experto, éstas son algunas formas de cuidarte si tienes depresión posparto:

Trátate bien

Asegúrate de que atiendes tus necesidades principales: intenta dormir y comer bien, y no te sientas culpable acerca de cómo te sientes ahora. El hecho de que tengas una depresión posparto no significa que seas una mala madre o que no quieras a tu bebé. Una vez que te sientas mejor, los sentimientos de culpa y desesperación disminuirán.

No te exijas demasiado

Si tienes depresión clínica o ansiedad, simplemente salir de la cama y enfrentar tu día ya es difícil lo suficiente. Sé comprensiva y bondadosa contigo misma, y tómate las cosas con calma.

Pide ayuda

Una parte muy importante de ser una buena madre es saber cuándo pedir ayuda, de manera que no tengas miedo de hacerlo durante estos momentos difíciles. Dile a tu pareja cómo te puede ayudar, ya sea cuidando del bebé, cocinando o limpiando, o acompañándote al doctor. Los familiares y amigos cercanos también te pueden echar una mano.

Comparte tus sentimientos con otros

Mantén una buena comunicación con tu pareja y cuéntale lo que estás sintiendo. Llama a un familiar o a una amiga que te sepa escuchar. Únete a un grupo para mamás para encontrar apoyo, o habla con mamás en nuestros foros. Puede que te sorprenda saber cuántas mamás están experimentando sentimientos similares.

No te abandones «por fuera»

Cuidar tu aspecto físico a veces te puede ayudar por dentro. Haz que tu esposo o un familiar o amigo cuiden de tu bebé mientras tú te das una ducha relajante. Maquíllate, si lo haces normalmente. Sal de compras y elige cosas solo para ti. También te puedes poner tus prendas favoritas en esos días que son particularmente difíciles. Sentirte mejor por fuera te ayudará a sentirte mejor por dentro.

Averigua cuándo puedes comenzar a hacer ejercicio para ponerte en forma después del parto.

Descansa

El cuidar de un recién nacido 24 horas al día es muy cansado y podrías estar exhausta. Desafortunadamente, es común que las mamás que sufren de depresión posparto no puedan dormir cuando lo desean. Pero es importante buscar momentos de descanso.

Puedes simplemente relajarte leyendo una revista o viendo la televisión. Pídele a un familiar o a una amiga que vigile a tu bebé, aunque sea por una hora, todos los días. Si no hay nadie que te pueda ayudar, puedes contratar a una niñera que tenga experiencia con recién nacidos.

Nota: Pon siempre a tu bebé a dormir sobre una superficie segura (como su cuna o moisés) antes de acostarte tú. Dormitar en el sofá o en la cama con el bebé en brazos es uno de los factores que aumentan el riesgo del síndrome de muerte súbita infantil y otros tipos de lesiones y muertes accidentales relacionadas con el sueño.

Sal a la calle

Pon a tu bebé en su cochecito y llévalo a dar un paseo, aunque sea alrededor de la cuadra, o sal con una amiga a un café cercano. El aire fresco, el sol y la compañía les harán bien a tu bebé y a ti. Si un paseo es demasiado para ti en este momento, simplemente vete fuera, cierra los ojos, respira hondo, y siéntate al sol durante unos minutos. Te ayudará.

Tómate las cosas con calma

Resiste la tentación de lavar la ropa mientras el niño duerme y deja que el resto de las tareas esperen. Haz que te traigan la comida, o pídele a tu pareja que te traiga algo de camino a la casa. Resiste también el impulso de verificar tu email o teléfono, y mejor relájate con un buen libro y un té de manzanilla. Si estás de baja por maternidad, olvídate de todo lo referente al trabajo. Recuerda que en poco tiempo estarás lista para trabajar de nuevo.

Mi pareja tiene depresión posparto. ¿Cómo puedo ayudarla?

Lo más importante es que tu pareja obtenga el tratamiento adecuado. Tú no puedes quitarle la depresión posparto, pero puedes estar a su lado para apoyarla.

Tu apoyo es vital para su recuperación, o sea que ofrécele ayuda cuando lo necesite e intenta no juzgarla. Puedes hablar con el ginecólogo, comadrona (o partera) o psicólogo de tu pareja para obtener más información sobre su condición e intentar comprender mejor por lo que está pasando.

El periodo del posparto es también difícil para los papás, por eso asegúrate de descansar todo lo que puedas y cuidarte tú también. Después de todo, tú también estás atendiendo a las necesidades del bebé.

Adaptarse a la paternidad puede ser aún más difícil cuando tu pareja tiene depresión posparto, sobre todo si esperaban que después de tener al bebé iban a tener una etapa feliz en familia.

Algunos papás desarrollan depresión posparto debido a factores como el miedo a la paternidad, las preocupaciones financieras e incluso el hecho de que su pareja esté pasando por una depresión. Presta atención a tus sentimientos y habla con tu médico si tú también estás experimentando síntomas de depresión.

Traducido y modificado de: Babycenter y MedlinePlus